Signos y síntomas del COVID-19 persistente

Puntos clave

  • El COVID-19 persistente incluye una amplia gama de síntomas y condiciones médicas en curso que pueden durar semanas, meses o hasta años.
  • La mayoría de las personas con síntomas de COVID-19 persistente observan una mejora significativa después de 3 meses, mientras que otras pueden tardar hasta 6 meses en mejorar desde la aparición de los primeros síntomas.
  • Algunas personas pueden tener problemas de salud de diferentes tipos y combinaciones de síntomas que requieren atención integral.
  • Los síntomas del COVID-19 persistente pueden provocar una discapacidad.
  • Hable con su proveedor de atención médica si cree que usted o su hijo o hija tienen COVID-19 persistente.
Una médica con mascarilla habla con su paciente.

Signos y síntomas

Una mujer sentada en el piso
Los síntomas del COVID-19 persistente pueden durar semanas, meses o incluso años.

Las personas con COVID-19 persistente pueden tener una amplia variedad de síntomas, desde leves hasta graves, y que pueden parecerse a los síntomas de otras enfermedades. Los síntomas pueden durar semanas, meses o años después de enfermarse de COVID-19 y aparecer, perdurar, resolverse y volver a aparecer en distintos lapsos de tiempo. Es posible que el COVID-19 persistente no afecte a todos de la misma manera. Algunas personas pueden tener problemas de salud de distintos tipos y combinaciones de síntomas con estas características:

  • Son difíciles de reconocer o diagnosticar
  • Requieren una atención integral
  • Causan discapacidad

Dato

La fatiga, la nube mental y el malestar general posesfuerzo (PEM, por sus siglas en inglés) son síntomas que se notifican con frecuencia, pero se han identificado más de 200 síntomas del COVID-19 persistente.

Otros síntomas frecuentes notificados (no es una lista exhaustiva):

Síntomas generales

  • Cansancio o fatiga que interfiere con la vida diaria
  • Síntomas que se agravan después de realizar un esfuerzo físico o mental
  • Fiebre

Síntomas respiratorios y cardiacos

  • Dificultad para respirar o falta de aire
  • Tos
  • Dolor de pecho
  • Latidos rápidos del corazón (también conocido como palpitaciones)

Síntomas neurológicos

  • Dificultad para pensar o concentrarse (a veces denominada "nube mental")
  • Dolores de cabeza
  • Problemas para dormir
  • Mareos (desvanecimiento) al ponerse de pie
  • Sensación de hormigueo
  • Alteraciones del gusto o el olfato
  • Depresión o ansiedad

Síntomas digestivos

  • Diarrea
  • Dolor estomacal
  • Estreñimiento

Otros síntomas

  • Dolor muscular o en las articulaciones
  • Sarpullido
  • Cambios en los ciclos menstruales

Síntomas difíciles de explicar y manejar

Algunas personas con COVID-19 persistente tienen síntomas que son difíciles de explicar o de manejar. No hay pruebas de laboratorio que permitan determinar si sus síntomas sin causa aparente se deben al COVID-19 persistente. Las personas con estos síntomas sin causa aparente a veces pueden sentirse incomprendidas o estigmatizadas. Esta situación puede demorar el diagnóstico y la recepción del cuidado o tratamiento adecuado. El tratamiento del COVID-19 persistente se centra en manejar los síntomas, reducir el efecto en las actividades diarias y mejorar la calidad de vida.

¿Tiene síntomas de COVID-19 persistente?

Consulte a su proveedor de atención médica si presenta síntomas que son difíciles de explicar o que persisten, o cree que usted o su hijo o hija tienen COVID-19 persistente.

Complicaciones

Algunas personas, en especial las que tuvieron COVID-19 grave, pueden sufrir efectos multiorgánicos o condiciones médicas autoinmunitarias que duran semanas, meses o incluso años después del COVID-19. Los efectos multiorgánicos pueden afectar muchos sistemas del cuerpo que incluyen el corazón, los pulmones, los riñones, la piel y el cerebro. Los síntomas de muchas de estas complicaciones multiorgánicas son similares a los síntomas que suelen notificarse por el COVID-19 persistente. Como resultado de estos efectos, las personas que tuvieron COVID-19 pueden ser más propensas a tener condiciones médicas nuevas o agravadas, como las siguientes:

Síndrome poscuidados intensivos

Mujer acostada en la cama de un hospital.
Las personas con síndrome poscuidados intensivos (PICS, por sus siglas en inglés) pueden tener un alto riesgo de presentar COVID-19 persistente

Las personas que están gravemente enfermas u hospitalizadas pueden tener problemas como el síndrome poscuidados intensivos (PICS). A pesar de que este síndrome no se refiere específicamente a la infección por el SARS-CoV-2, el virus que causa el COVID-19, puede ocurrir y contribuir a que una persona presente COVID-19 persistente. Los efectos sobre la salud como consecuencia del PICS pueden aparecer cuando una persona se encuentra en una unidad de cuidados intensivos (ICU) e incluyen los siguientes:

Para las personas que tienen el síndrome poscuidados intensivos después de un diagnóstico de COVID-19, es difícil determinar si estos problemas de salud son causados por haberse enfermado gravemente, por el virus o por una combinación de ambos.

El COVID-19 persistente y la encefalomielitis miálgica/síndrome de fatiga crónica

Algunas personas con COVID-19 persistente presentan síntomas similares a los que notifican las personas que tienen otras enfermedades crónicas menos conocidas que pueden aparecer después de otras infecciones, tales como la encefalomielitis miálgica/síndrome de fatiga crónica (EM/SFC). Las personas con EM/SFC y otras enfermedades relacionadas con infecciones pueden tener dificultad para lo siguiente:

  • Reconocer e identificar los síntomas de su enfermedad
  • Lograr que su familia, amigos y proveedores de atención médica crean sus síntomas
  • Obtener un diagnóstico
  • Controlar sus síntomas o condiciones médicas

Los CDC trabajan con sus socios para comprender mejor y brindar apoyo a las personas que sufren por COVID-19 persistente, EM/SFC y otras enfermedades crónicas.