Influenza equina (influenza de los caballos)

Preguntas y respuestas

Dos caballos en un campo

¿Qué es la influenza equina (influenza de los caballos)?

La influenza equina (influenza de los caballos) afecta la nariz, la garganta y en algunos casos los pulmones. Es causada por virus de la influenza que suelen propagarse en caballos y animales estrechamente relacionados, como burros y cebras. Los virus provocan en esos animales signos y síntomas similares a los de la influenza, como los que causan los virus de la influenza estacional en las personas.

Los virus de la "influenza de los caballos" se propagan principalmente de aves a caballos. Los virus de la influenza de los caballos, o "virus de la influenza equina" (abreviado como EIV) han sido históricamente virus de influenza tipo A que pertenecen a dos subtipos: H7N7 y H3N8.

  • El subtipo H7N7 del EIV se notificó por primera vez en la década de 1950 y por última vez en la década de 1970. Actualmente se considera extinguido.
  • El subtipo H3N8 del EIV se notificó primero en caballos en los Estados Unidos en la década de 1960 y todavía hoy sigue propagándose entre los caballos de todo el mundo.
  • Se notificó la presencia del subtipo del virus H3N8 en perros, caballos y aves, pero estos virus son diferentes en cada especie.

¿Las personas pueden infectarse por la influenza de los caballos?

En entornos experimentales, se ha demostrado que los virus de la influenza de los caballos pueden infectar a las personas, y algunas personas que tuvieron contacto con caballos infectados han desarrollado anticuerpos (un signo de infección) contra los virus de la influenza equina, pero ninguna persona expuesta a los virus de la influenza de los caballos se ha enfermado, según la Organización Mundial de Sanidad Animal. En general, los virus de la influenza de los caballos representan una baja amenaza para las personas. Aunque en la actualidad los virus de la influenza de los caballos no están bien adaptados a las personas, es posible que algún día uno de estos virus cambie de manera tal que pueda infectar y propagarse fácilmente entre las personas. Por este motivo, los CDC y sus socios en sanidad animal monitorean de cerca los cambios que se producen en los virus de la influenza en circulación. Este tipo de vigilancia es especialmente importante para hacer un seguimiento de los cambios en los virus de influenza animal que podrían propagarse entre animales y personas.

Los virus de influenza aviar A(H3N8) siguen propagándose entre las aves, pero son diferentes de los que se propagan entre los caballos. Si bien no es común, las infecciones en humanos por virus de influenza aviar A(H3N8) se han notificado en todo el mundo anteriormente y recientemente. El EIV H3N8 se propagó a los perros en los Estados Unidos a finales de la década de 1990 y se adaptó para convertirse en un virus de la influenza canina mientras se propagaba entre los perros. Se notificó por última vez en 2016, lo que sugiere que este virus se ha extinguido en los perros.

¿Cómo se propaga la influenza equina entre los caballos?

Los virus de la influenza de los caballos son muy contagiosos entre los caballos y se cree que se propagan principalmente a través de las gotitas que se producen cuando el animal tose o estornuda. El virus puede ingresar al organismo a través de los ojos, la nariz o la boca, o puede ser inhalado por otros caballos cercanos. En la actualidad, los virus de la influenza de los caballos no están bien adaptados para infectar a las personas.

Los caballos pueden propagar el EIV incluso antes de mostrar signos de enfermedad. Los virus de la influenza de los caballos también pueden propagarse indirectamente a través de objetos que estén contaminados por el virus, como indumentaria, equipamiento y cepillos. Si el virus de un objeto contaminado es inhalado, absorbido o ingerido por un caballo susceptible, el virus podría propagarse. El EIV también puede encontrarse en superficies donde se alojan o transportan animales infectados.

Es importante implementar medidas de higiene y control de la infección en los rebaños, incluida la limpieza de manos y ropa, además de limitar el acceso a personas que no hayan estado expuestas durante un brote. Por lo general, los caballos empiezan a mostrar signos de infección por la influenza equina al cabo de uno o tres días. Una vez que el virus es introducido en un área con una población de animales susceptibles, puede propagarse rápidamente y causar brotes entre los caballos. El hacinamiento y el transporte son factores que promueven la propagación entre los animales.

¿Los virus de influenza equina pueden propagarse entre los caballos y otros mamíferos?

Los virus de la influenza de los caballos se propagaron por primera vez de aves a caballos. Los virus de influenza aviar A(H3N8) que circulaban entre las aves infectaron a los caballos, y esos virus acabaron adaptándose a los caballos y empezaron a propagarse regularmente entre los caballos como virus de influenza equina A(H3N8). Estos virus se aislaron por primera vez en caballos en 1963. La infección puede producirse por exposición a la saliva y las mucosas de animales infectados.

A finales de la década de 1990, el EIV H3N8 infectó y se adaptó a los perros y empezó a propagarse regularmente entre estos animales como virus de influenza canina A(H3N8). A medida que los virus H3N8 se fueron adaptando a cada organismo hospedador, los virus H3N8 de aves, caballos y perros cambiaron entre sí. Mientras que los distintos virus H3N8 siguen propagándose entre aves y caballos, el virus H3N8 de la influenza canina se ha extinguido entre los perros.

¿Cómo se infectaron los perros por la influenza equina?

El EIV H3N8 se propagó entre los perros y al propagarse y adaptarse a ellos, se convirtió en el virus de influenza canina H3N8, que actualmente se ha extinguido entre los perros. En el 2004, se notificaron en los Estados Unidos casos de una enfermedad desconocida en perros (inicialmente galgos) que afectaba la nariz, la garganta y, a veces, los pulmones. Una investigación demostró que esta enfermedad estaba causada por el virus de influenza equina A(H3N8). Los científicos creen que este virus pasó de una especie a otra (de caballos a perros) y se adaptó para provocar enfermedades en perros y diseminarse especialmente entre los perros alojados en perreras y refugios. No se ha registrado ninguna infección en humanos por CIV H3N8. El CIV H3N8 ya se ha extinguido en los perros.

¿Cuáles son los síntomas de la influenza equina en los caballos?

Los caballos infectados por el EIV pueden tener fiebre (temperatura corporal elevada entre 39 °C y 41 °C) y tos seca. Los caballos muy enfermos pueden tener resuello al respirar. Pueden presentarse otros signos, como pérdida del apetito, fatiga (cansancio) y moqueo. Es posible que los caballos que recibieron la vacuna contra el EIV disponible en los Estados Unidos no presenten uno o más de estos signos.

¿Existe una vacuna para la influenza equina?

Existen vacunas para proteger a los caballos contra la influenza equina desde la década de 1970. Incluyen los virus de la influenza de los caballos que más se propagan con diferentes vacunas que incluyen distintos virus de la vacuna. Estas vacunas se utilizan ampliamente para vacunar a los caballos domesticados. Un panel de expertos de la Organización Mundial de Sanidad Animal propone regularmente recomendaciones sobre los virus que deben incluirse en las vacunas.

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