Acerca de la influenza canina

Puntos clave

  • La influenza canina es una enfermedad respiratoria canina contagiosa.
  • Está causada por virus específicos de la influenza de tipo A conocidos por infectar, causar enfermedad y propagarse en perros.
  • En general, se considera que los virus de la influenza canina representan una amenaza baja para los humanos.
Perro golden retriever recostado.

Signos y síntomas

La influenza canina, también conocida como influenza del perro, actualmente está causada por un virus de influenza A(H3N2) que se propaga en los perros. Es probable que la influenza canina represente una baja amenaza para las personas. Los virus de la influenza canina A(H3N2) son diferentes a los virus de la influenza estacional A(H3N2) que suelen propagarse entre las personas.

A la fecha, no existe evidencia del contagio de los virus de influenza canina de los perros a las personas. No se ha reportado ningún caso de infección en seres humanos con el virus de la influenza canina en ningún lugar del mundo.

En 2016, los CDC usaron la herramienta de evaluación del riesgo de influenza para evaluar el riesgo potencial de que los virus de la influenza canina A(H3N2) provoquen una pandemia y se concluyó que era bajo.

Virus en evolución

Los virus de influenza cambian constantemente. Es posible que un virus de influenza A canina cambie para adquirir la capacidad de infectar y propagarse fácilmente entre las personas. Los seres humanos tienen poca inmunidad contra los nuevos virus de la influenza A no humanos. Las infecciones en personas con nuevos virus de la influenza A son preocupantes cuando se producen. Si estos virus adquieren la capacidad de propagarse fácilmente entre las personas, podría producirse una pandemia.

Por este motivo, la Organización Mundial de la Salud lleva a cabo una vigilancia mundial de la influenza, que permite detectar nuevas infecciones por el virus de influenza A en seres humanos. La vigilancia se centra en los nuevos virus de la influenza A de origen animal (como los virus de la influenza A aviar o porcina).

Síntomas de enfermedad en los perros

Los síntomas de esta enfermedad en perros incluyen los siguientes:

  • tos,
  • secreción nasal acuosa,
  • fiebre,
  • letargo,
  • ​​​​​​​secreción ocular y
  • disminución del apetito.

Sin embargo, no todos los perros pueden mostrar signos de enfermedad. La gravedad de la enfermedad asociada a la influenza canina en perros puede variar desde la ausencia de síntomas hasta una enfermedad grave que resulta en neumonía y, a veces, la muerte.

La mayoría de los perros se recuperan de la influenza canina en 2 o 3 semanas. Sin embargo, algunos perros pueden desarrollar infecciones bacterianas secundarias, que pueden provocar una enfermedad más grave y neumonía. Cualquiera que esté preocupado por la salud de su mascota, o cuya mascota muestre signos de influenza canina, debe comunicarse con su veterinario.

Hay pruebas disponibles para confirmar la infección por el virus de la influenza canina A(H3N2) en perros. Su veterinario puede decirle si es adecuado realizar la prueba.

Comprender los riesgos

Los virus de la influenza canina H3N2 no son endémicos en perros en los Estados Unidos, pero se siguen produciendo múltiples brotes localizados con mortandades regionales, sembrados por repetidas reintroducciones desde Asia. No se han registrado virus de la influenza canina H3N8 desde 2016 y parece que ya no circulan activamente.

Si surgen pruebas de que los virus de la influenza canina pueden infectar a las personas con la posibilidad de una propagación sostenida de persona a persona, los CDC tienen un plan previsto. Los CDC aplicarán sus facultades existentes para limitar la introducción y/o propagación de ese virus pandémico en los Estados Unidos.

Las regulaciones de los CDC exigen que los perros estén saludables para entrar a los Estados Unidos. A los perros se les puede negar la entrada o se les puede evaluar más a fondo si parecen tener una enfermedad transmisible.

En el caso de los perros que parezcan enfermos o estén muertos a su llegada a los Estados Unidos, los CDC pueden exigir un examen veterinario o una necropsia (autopsia del animal) a cargo del propietario.

Existen diversas agencias que pueden tener autoridad regulatoria sobre el ingreso de mascotas como perros y gatos a los Estados Unidos.

El Servicio de Inspección Sanitaria de Animales y Plantas del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos tiene requisitos de sanidad animal relacionados con traer un perro de compañía a Estados Unidos desde un país extranjero.

Cómo se propaga

Casi todos los perros son susceptibles a la infección de la influenza canina. La influenza canina tiende a propagarse entre los perros alojados en perreras y refugios.

Se cree que la influenza canina se propaga principalmente a través de las gotitas respiratorias que se producen cuando los perros infectados tosen o estornudan. También puede propagarse a través del contacto con superficies contaminadas.

Qué hacen los CDC ante la influenza canina

Las regulaciones actuales de los CDC sobre el virus de la influenza se aplican únicamente a los virus con potencial pandémico en las personas. Sin embargo, los CDC están tomando una serie de medidas para estar preparados en el improbable caso de que la influenza canina se convierta en una amenaza para las personas o para otros animales que no sean perros.
  1. Los CDC continúan con las vigilancias anuales para detectar virus de influenza A estacional y nuevos. Todos los casos de infecciones en humanos con nuevos virus de influenza A son investigados en su totalidad. Las infecciones en humanos con un nuevo virus de influenza A de origen animal se reportan a los CDC.
  2. Los CDC disponen de protocolos de colaboración con los Servicios Veterinarios del Servicio de Inspección Sanitaria de Animales y Plantas (APHIS) del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos para trabajar conjuntamente en caso de brotes de nuevos virus de la influenza A. Estos mismos protocolos se seguirían en caso de un brote de influenza canina entre las personas.
  3. En tercer lugar, los CDC llevaron a cabo una evaluación de riesgos sobre el potencial pandémico de los virus de la influenza canina H3N2 utilizando la herramienta de evaluación del riesgo de influenza. La evaluación determinó que el riesgo pandémico que plantean los virus de la influenza canina es bajo.

Prevención

En los Estados Unidos existen vacunas para proteger a los perros contra la influenza canina H3N2. Su veterinario puede brindarle información adicional sobre estas vacunas y aconsejarle si usted debe considerar vacunar a su perro.

Los dueños de los perros que tienen tos u otros síntomas de enfermedades respiratorias deberían evitar exponer sus perros a otros perros o gatos. Tras la exposición a perros con signos de enfermedad respiratoria, las personas deben limpiar y desinfectar la ropa, el equipo, las superficies y las manos.

Biología

Orígenes de la influenza canina H3N8

Los virus de influenza canina H3N8 se originaron en caballos y se contagiaron a los perros. Los virus de la influenza equina H3N8 existen en los caballos desde hace más de 40 años.

En 2004, se reportaron en los Estados Unidos casos de una enfermedad respiratoria desconocida en perros. Una investigación demostró que esta enfermedad respiratoria había sido causada por los virus de la influenza equina.

Los científicos creen que, tras saltar de los caballos a los perros, el virus se adaptó para causar la enfermedad en los perros y propagarse entre ellos. Se disemina con mayor rapidez entre los perros alojados en perreras y refugios. Ahora se considera un virus H3N8 específico del perro (canino).

En septiembre de 2005, los expertos identificaron a este virus como un "nuevo patógeno emergente en la población canina" en los Estados Unidos. No se han registrado virus de la influenza canina H3N8 desde 2016 y parece que ya no circulan activamente.

Orígenes de la influenza canina H3N2

Los virus de la influenza canina H3N2 se originaron en las aves y se propagaron a los perros. Los primeros virus de la influenza canina H3N2 se registraron en 2004. También se notificó la propagación del virus de la influenza canina H3N2 de perros a gatos.

Los virus de influenza canina H3N2 se detectaron por primera vez en perros en Corea del Sur en 2007. Estos virus también se reportaron en perros en China, Tailandia y Canadá.

Los virus de influenza canina H3N2 se detectaron por primera vez en los Estados Unidos en abril del 2015. Ahora se detectaron en varios estados y regiones de los Estados Unidos. Hasta la fecha, los virus caninos H3N2 notificados en los Estados Unidos fueron casi idénticos genéticamente a los notificados anteriormente en Asia.

Tratamiento

El tratamiento de la influenza canina consiste en gran medida en cuidados paliativos. En casos menos graves, estos cuidados paliativos pueden incluir medicación para que su perro se sienta más cómodo y líquidos para asegurar que su perro se mantenga bien hidratado. Esto ayuda a mantener al perro cómodo e hidratado mientras su organismo prepara una respuesta inmunitaria.

Su veterinario puede recetar un antibiótico de amplio espectro si se sospecha de alguna infección bacteriana secundaria.

Riesgo de influenza canina

Un pequeño porcentaje de perros muere de influenza canina. Algunos perros presentan infecciones asintomáticas (sin síntomas de enfermedad) mientras que otros enferman gravemente. La enfermedad grave se caracteriza por la aparición de síntomas de neumonía.