La influenza y las personas que viven con VIH

Un hombre con un lazo rojo por la lucha contra el SIDA

Las personas con VIH corren mayor riesgo de sufrir complicaciones graves asociadas a la influenza.

El virus de inmunodeficiencia humana (VIH) es el virus que causa el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA). El VIH ataca las células del sistema inmunitario llamadas células CD4 y, si no se trata, destruye gradualmente la capacidad que tiene el organismo de combatir las infecciones y ciertos cánceres. Los CDC estiman que casi 1.2 millones de personas de 13 años de edad o más en los Estados Unidos vivían con VIH hacia fines del 2019, el último año para el que hay información disponible.

Las personas que viven con VIH (PWH, por sus siglas en inglés) tienen mayor riesgo de presentar complicaciones graves por la influenza, especialmente aquellas que tienen un bajo recuento de células CD4 (sistema inmunitario muy comprometido) o que no están tomando medicamentos para tratar el VIH (terapia antirretroviral o ART). De todas las PWH en los Estados Unidos en 2018-19, 81 % estaban bajo tratamiento con ART, lo que implica que casi un 20 % era especialmente vulnerable a complicaciones por la influenza. Hay estudios que han señalado que los síntomas de la influenza se pueden prolongar y que el riesgo de complicaciones por la influenza y diseminación prolongada del virus de la influenza  es mayor para ciertas personas con VIH.

Como corren mayor riesgo de presentar complicaciones graves por la influenza, es especialmente importante que las PWH reciban la vacuna inyectable contra la influenza todos los años. Las PWH que no están recibiendo ART podrían no tener una respuesta inmunitaria a la vacuna tan sólida como las que sí están recibiendo ART. Las PWH que tienen síntomas de la influenza, especialmente quienes tienen un recuento bajo de linfocitos CD4 que no reciben ART, deben recibir inmediatamente tratamiento con medicamentos antivirales para la influenza.

Esta página aborda las recomendaciones relacionadas con las vacunas inyectables contra la influenza para PWH, así como el grupo de medicamentos antivirales contra la influenza para esta población.

Imagen de la promoción: comprométase esta temporada. Si tiene VIH o SIDA, vacúnese contra la influenza.

La vacuna inyectable contra la influenza es la mejor protección

Si tiene VIH, tiene mayor riesgo de presentar complicaciones graves asociadas a la influenza. Además de tomar ART, la mejor forma de prevenir la influenza es recibir la vacuna inyectable contra la influenza.

  • Varios estudios aleatorizados en adultos con VIH han demostrado que la vacunación contra la influenza puede reducir el riesgo de contraer la enfermedad. Estudios realizados en los Estados Unidos revelaron que la vacunación contra la influenza previene la enfermedad y reduce las consultas médicas entre las personas con VIH y otras afecciones que causan inmunodepresión.
  • Las personas con VIH deberían recibir todos los años la vacuna inyectable contra la influenza (no la vacuna contra la influenza en atomizador nasal). Las vacunas inyectables contra la influenza están aprobadas para personas con VIH y otras afecciones de salud. No se debe indicar la vacuna contra la influenza con virus vivos atenuados [LAIV] (atomizador nasal) a personas con VIH y SIDA. LAIV (FluMist®) contiene una forma debilitada del virus vivo de la influenza y no está recomendada para usarse en personas con sistemas inmunitarios debilitados (inmunosupresión).

Importante: Si bien las PWH pueden generar una respuesta inmunitaria a la vacunación contra la influenza, las personas con enfermedad avanzada por VIH quizá no respondan tan bien. En ciertos casos, los médicos pueden considerar utilizar medicamentos antivirales contra la influenza para la prevención. Visite la página Resumen para médicos: quimioprofilaxis  para obtener más información.

Reciba las vacunas neumocócicas

  • La neumonía neumocócia es un ejemplo de una complicación grave por la influenza que puede causar la muerte.
  • Las PWH también deben tener al día la vacuna neumocócica para protegerse de enfermedades producidas por neumococo, como neumonía, meningitis e infecciones en el torrente sanguíneo.
  • Puede recibir la vacuna antineumocócica conjugada o la vacuna antineumocócica polisacárida (pero no las dos) al vacunarse contra la influenza.
  • Consulte a su proveedor de atención médica para saber qué vacunas neumocócicas son aptas para usted.

Otras medidas preventivas para personas con VIH

Además de recibir la vacuna inyectable contra la influenza todos los años, las personas que viven con VIH deben tomar las mismas medidas preventivas cotidianas que los CDC recomiendan para todos, como evitar el contacto con personas que están enfermas, cubrirse la boca y la nariz al toser y lavarse las manos con frecuencia. Esto también puede incluir tomar medidas para purificar el aire, y limpiar y desinfectar las superficies y los objetos que puedan estar contaminados con virus. Vea más información acerca de las principales estrategias de prevención.

Los síntomas de la influenza y el tratamiento

Si presenta síntomas de influenza, llame de inmediato a su médico. Existen medicamentos antivirales que pueden tratar la influenza y prevenir las complicaciones graves relacionadas. Estos medicamentos son más eficaces cuanto antes comience a tomarlos. Los CDC recomiendan el tratamiento inmediato para aquellas personas que tengan una infección o una presunta infección por el virus de la influenza y tienen mayor riesgo de sufrir complicaciones graves por la influenza, como las personas con VIH.

Síntomas

Los síntomas de la influenza incluyen fiebre, tos, dolor de garganta, secreción o congestión nasal, dolores corporales, dolor de cabeza, escalofríos y fatiga. Algunas personas también pueden tener vómitos y diarrea, aunque esto es más frecuente en niños que en adultos. Las personas pueden estar infectadas por el virus de la influenza y tener síntomas respiratorios sin fiebre.

Tratamiento

  • Los medicamentos antivirales contra la influenza son medicamentos que combaten la enfermedad y evitan que los virus de la influenza se reproduzcan en su organismo.
  • Los medicamentos antivirales pueden aliviar su enfermedad y hacer que se sienta mejor rápidamente. También pueden evitar problemas serios de salud que puedan ser provocados por la enfermedad de la influenza.
  • El tratamiento con un medicamento antiviral para la influenza debe iniciarse lo antes posible, porque estos medicamentos son más eficaces cuando el tratamiento comienza de inmediato (dentro de las 48 horas de la aparición de los síntomas).
  • Los medicamentos antivirales contra la influenza están disponibles solo con receta de un proveedor de atención médica.
  • Hay cuatro medicamentos antivirales contra la influenza aprobados por la FDA y recomendados por los CDC esta temporada que se pueden usar para tratar la influenza.
Signos de advertencia de emergencia de complicaciones por la influenza

Las personas que experimentan estos signos de advertencia deberían recibir atención médica de inmediato.

En los niños

  • Respiración acelerada o problemas para respirar
  • Coloración azulada en los labios o el rostro 
  • Se expande la caja torácica al respirar
  • Dolor de pecho
  • Dolor muscular intenso (el niño se rehusa a caminar)
  • Deshidratación (no orina por 8 horas, tiene la boca seca y al llorar no tiene lágrimas)
  • No está alerta ni interactúa cuando está despierto
  • Convulsiones
  • Fiebre superior a 104 grados Fahrenheit que no puede controlarse con medicamentos para reducir la fiebre
  • En el caso de niños menores de 12 semanas, cualquier cuadro febril
  • Fiebre o tos que mejora pero reincide o empeora
  • Agravamiento de las afecciones crónicas

En los adultos

  • Dificultad para respirar o falta de aire
  • Dolor o presión constante en el pecho o abdomen
  • Mareos persistentes, confusión, dificultad para despertarse
  • Convulsiones
  • No orina
  • Dolor muscular intenso
  • Debilidad o inestabilidad intensa
  • Fiebre o tos que mejora pero reincide o empeora
  • Agravamiento de las afecciones crónicas

 Estas listas no incluyen todo. Consulte a su proveedor de atención médica ante cualquier otro síntoma grave o que le preocupe.

Recomendaciones de vacunación de personas con alergia al huevo

Las personas con alergia al huevo pueden recibir cualquier vacuna (tenga o no proteína de huevo) que sea apropiada para su edad y estado de salud. Antes se recomendaba que las personas con alergia grave al huevo (quienes hayan tenido cualquier síntoma excepto sarpullido por la exposición al huevo) se vacunaran en un entorno médico de atención ambulatoria u hospitalaria. A partir de la temporada 2023-2024 ya no se recomiendan medidas de seguridad adicionales para la vacunación contra la influenza de las personas con alergia al huevo, más allá de las recomendadas para cualquier vacuna, independientemente de la gravedad de su reacción anterior al huevo. Todas las vacunas se deben administrar en entornos en los que es posible reconocer y tratar rápidamente las reacciones alérgicas.


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